¿Sientes que has aprendido algo nuevo hoy?
Con cada paso que damos, todo lo que nos rodea; cada experiencia, sensación, persona, etc. hace que estemos en constante aprendizaje y esto es lo que nos ayuda a seguir resolviendo los problemas del día a día.
A medida que un ser humano crece, sus procesos conscientes también lo hacen. La inteligencia de los seres humanos, nos ha permitido evolucionar y pasar de las formas de aprendizaje inconscientes, a unas prácticas de razonamiento conscientes que nos ayudan a estar aprendiendo constantemente durante toda la vida. Las diferentes etapas del conocimiento que parten desde el inconsciente hasta lo consciente y nos permiten reflexionar, discernir y aplicar para aprender.
Con el paso de los años, los seres humanos comenzamos a entrenar los procesos de aprendizajes consciente a través de los diferentes tipos de academia guiados por un tutor que nos puede transmitir su experiencia y conocimiento y por eso pasamos muchos años de nuestras vidas en el colegio, la universidad o realizando estudios complementarios guiados, pero con el paso del tiempo nos hemos adaptado mucho a la educación institucional, dejando de lado nuestra capacidad de aprender por nuestra cuenta o de acudir al estado natural para aprender; el auto aprendizaje.
Al acondicionarnos a la institucionalidad, hemos creído que nuestras capacidades de aprendizaje tienen que estar guiadas y la realidad es que los seres humanos pasamos la mayor parte del tiempo en procesos de autoaprendizaje y esta es una habilidad innata que te ayuda a aprender a través de tus propios medios, cuestionamientos y razonamiento. A pesar de que muchas personas creen que no son capaces de ser autodidactas, la realidad es que todos tenemos esta capacidad y podemos desarrollarla y mejorarla.
¿Por qué debería mejorar mis habilidades de autoaprendizaje?
Vivimos en un mundo que está en constante cambio y desarrollo, en donde cada vez se genera más información, producto de una fuente constante de nuevos conocimientos; así que quedarte solo con los saberes institucionales, te hará quedar desactualizado poco a poco. Ser autodidacta te permitirá estar a la orden del día y reforzar tus talentos, para ser más competitivo en el entorno laboral.
Si tu objetivo es crecer en una empresa, tener conocimientos diferenciales o incluso llevar a cabo tu propio negocio el autoaprendizaje debería ser tu práctica constante.
Desde Arquitectura del Talento quisimos hacer parte de los procesos de autoaprendizaje, por eso decidimos compartirles nuestro conocimiento en temas de selección y talento, a través de un curso que desarrollamos con el objetivo de Activar tu talento; si deseas saber más sobre el curso, haz click aquí.
Motivación y automotivación: la motivación es clave a la hora de lanzarse en el camino del autoaprendizaje; en un mundo lleno de excusas, la curiosidad, las dudas y la motivación de solucionarlas son la motivación que el mundo necesita para seguir evolucionando.
Entrena tu disciplina: además de motivación necesitas controlar tu tiempo y fijarte una meta; y como todo en la vida, cada meta se cumple con disciplina, establece los horarios claves y dedica tu atención para disponerte a aprender por tu cuenta.
Saca el máximo provecho de tu entorno: estamos en un mundo con una sorprendente capacidad tecnológica, que nos permite acceder a toda la información existente en tan solo segundos y todo ese conocimiento se encuentra en un computador, tu celular, los libros, etc. Tienes el conocimiento en tus manos, hoy más que nunca el autoaprendizaje se facilita gracias a la tecnología.
Rétate y pon en práctica lo aprendido: Lo más importante del camino del autoaprendizaje es no rendirte hasta que logres dominar este nuevo saber y cada que vayas adquiriendo conocimiento, ponerlo en práctica te ayudará a interiorizar y reforzar el conocimiento, haciendo que pase de ser un proceso inconsciente a un proceso que realizas de manera consciente.
Lento pero seguro: no desconfies de tu proceso o de lo que has aprendido, seguramente cada paso que das te trae algo que no sabías y eso te puede ayudar a hacer la diferencia. Pero lo importante es que tampoco te confíes de sabertelas todas, porque recuerda que la información siempre está cambiando.
Sin miedo a nuevos retos: la diferencia está en que no te digas “no sé esto o aquello” y que justificandote en esa razón rechaces algo que podría ser bueno para ti, recuerda que el conocimiento está ahí y solo hace falta que te decidas a aprenderlo y asumir a asumir un nuevo reto.
Así que después de saber todo esto sobre el autoaprendizaje, qué tal si te lanzas en un nuevo reto, para impulsarte como profesional y activar tu talento; para que en tu próxima entrevista de trabajo, puedas estar más preparado y conociendote mejor profesionalmente. Inscríbete aquí