Muchas personas confunden tener presencia en redes sociales con tener visibilidad. Y siento decir que no es lo mismo. Hay quien sin ser consciente actúa como un “zombie laboral” en internet, “esperando” una oportunidad que difícilmente llegará (salvo que tengas una cualificación o competencias difíciles de encontrar por las empresas).
Actualmente es preciso ser VISIBLE en redes sociales si quieres ser encontrado por los reclutadores, clientes o posibles colaboradores. Según un estudio realizado el 66% de los reclutadores consultan el perfil de las personas candidatas en redes sociales, y lo que suelen mirar además de la trayectoria profesional, son las habilidades y aptitudes, los ejemplos de su trabajo y las recomendaciones principalmente.
Por lo tanto, es conveniente tener un perfil bien definido en redes sociales y conocer las claves para ser visible no solo por los reclutadores y clientes, sino también por los algoritmos.
El “Superpoder de la Visibilidad”
Éste no se hace en una mañana o en un día, cuesta tiempo y esfuerzo. Para que te encuentren, antes has de conocer o desarrollar tu marca personal, averiguar en qué talentos destacas, los que te diferencian de tu competencia y los que vinculan los demás contigo. Ese proceso de gestión de la marca personal se llama personal branding.
El objetivo es conseguir que la realidad de lo que “somos” (nuestro expertise, valores, trayectoria, saber hacer…) sea igual que la “percepción” que los demás tienen de nosotros, es decir nuestra marca personal. Lograr una reputación online positiva como resultado de las acciones que llevemos a cabo.
Las marcas personales consolidadas generan confianza, hacen que nos diferenciemos del resto de la competencia, tenemos más oportunidades de ser elegido, nos posiciona como experto/a, y nos ayuda a ampliar la red de contactos entre otros beneficios.
El proceso resumido sería, primero, conocernos a nosotros mismos, cuáles son nuestras competencias y hacia dónde queremos dirigirnos, cual es nuestro foco y para qué, así como averiguar lo que los demás dicen de nosotros.
En ese autoconocimiento es conveniente comparar nuestra trayectoria profesional y las competencias que tenemos con las que se requiere en la ocupación que queremos desempeñar. De esta forma detectaremos si necesitamos trazar un itinerario para adquirir nuevas aptitudes y capacidades, y segundo sabremos qué competencias tenemos y que son coincidentes con el puesto, a fin de saber cuál tenemos que visibilizar.
El segundo paso se basa en desarrollar una estrategia personal: fijar unos objetivos, crear una propuesta de valor y definir el mensaje que queremos transmitir. Para conseguir la dirección adecuada se debe averiguar quién es nuestro público objetivo y a través de qué acciones conseguiremos dicho objetivo.
Y tercero y definitivo deberemos crear un plan de Visibilidad que incluirá un plan de comunicación y una estrategia de networking. En qué canales nos moveremos, que información compartiremos o crearemos (de que temas voy a tratar), que herramientas digitales me pueden ayudar a la curación de contenidos (recopilar, filtrar y seleccionar la información más relevante para difundirla) o a programar, entre otros.
Equivocadamente se piensa que acumular contactos es hacer networking, eso es tener una base de datos o un CRM. El networking significa construir y hacer crecer una red de contactos profesionales de calidad, con el fin de establecer sinergias basadas en la confianza y en la ética, en donde los y las profesionales aportan valor a la relación y ambas partes se benefician.
Según un estudio “sólo el 20% de las ofertas de empleo que se generan son visibles”. Lo que significa que el otro 80% permanece en lo que se denomina mercado oculto o no visible de las ofertas de empleo. Por lo tanto, si se quiere ser encontrado y estar en ese 80% de ofertas que se hace a través de referencias y contactos es conveniente activar y cultivar adecuadamente tu red de contactos. Y eso solo se hace a través de “conversaciones”.
Sabrás que eres visible y que tu marca personal está consolidada sin necesidad de acudir a ninguna métrica cuando tu perfil en redes sociales tenga muchas visitas y te envíen invitaciones, cuando los contenidos que publicas tengan interacciones y comentarios, y cuando recibas correos electrónicos con propuestas de colaboración o para informarte de algún proceso de selección. Eso quiere decir que “Tus acciones están teniendo resultados”.
Tomado de: http://blog.infoempleo .com